domingo, 16 de febrero de 2014

De voluntaria en Calcuta

Pero Calcuta fue más que solo otra ciudad India en mi viaje. Mucho más.

Después de tres semanas en Tailandia volví  a Calcuta donde ya había pasado dos días. Y lo hice con ganas porque lo qué había visto de la ciudad me había gustado y estaba muy ilusionada con lo que me esperaba. Además, al poco de aterrizar me di cuenta de que había echado de menos India. Si os digo yo que este país engancha a pesar de todo.

Hace casi cinco años estuve de voluntaria en Marruecos y después no sabía dónde ni cuándo pero sí que repetiría. Hasta que descubrí la congregación de la Madre Teresa de Calcuta: las Misioneras de la Caridad.

No importa si tienes 15 o 90 años, si eres de india o de la otra punta del mundo, si no tienes estudios o tienes cinco doctorados, si vienes para un día o para toda la vida. Lo que importa es que tengas ganas de ayudar y sonrisas y cariño de sobra para mujeres y hombres a los que la vida les ha dejado de sonreír (si alguna vez lo hizo) hasta que las Misioneras de la Caridad se cruzaron en ella.

Es muy fácil. Sin tener que avisar para nada antes, llegas a Calcuta y te buscas un alojamiento en la zona de Sudder Street o cerca de la Casa Madre (Mother House).

Para registrarte como voluntario tienes que ir con tu pasaporte al centro de Shishu Bhavan, localizado en el número 78 de la calle AJC Bose Road, a las 3pm los lunes, miércoles o viernes. Allí te darán una tarjetita que mejor lleva contigo todo el rato…

Aunque si eres una impaciente como yo que llegué un sábado y quería empezar ya el domingo, puedes ir directamente a la Casa Madre (54A AJC Bose Road) a las 7am, hora del desayuno, y allí una Sister te dará un pase de uno, dos o tres días hasta que puedas registrarte.

Cuando te dan el pase de día normalmente no puedes elegir a que centro ir pero una vez en el registro, te explican los diferentes centros en los que puedes trabajar y entonces si quieres puedes cambiar de centro. Está prohibido sacar fotos en los centros excepto en tu último día cuando después del desayuno te dan un pase para hacer fotos…siempre que enseñes tu tarjeta de registro y no se te olvide como me paso a mi…

Hay seis centros:

  • Prem Dan. Apto para mujeres y hombres. Solo por las mañanas. Es el centro más grande de todos con actualmente unos 200 hombres y unas 155 mujeres adultas que mentalmente y/o físicamente no están bien.
  • Nirmal Hriday/Kalighat. Apto para mujeres y hombres. Por las mañanas y por las tardes. Es el primer centro que abrió la Madre Teresa y allí viven unos 80 hombres y mujeres moribundos como al parecer se conoce entre los voluntarios aunque su estado es muy parecido a los de Prem Dan.
  • Shanti Dan. Apto solo para mujeres. Solo por las mañanas. En una zona viven mujeres adultas que no están bien mentalmente o emocionalmente y no pueden valerse por sí mismas y en otra zona viven mujeres jóvenes más o menos en las mismas condiciones. Creo que también hay una zona de niños.
  • Shishu Bhavan. Apto solo para mujeres. Por las mañanas y por las tardes. Aquí se alojan niños que tampoco están bien mentalmente y/o físicamente. También hay un dispensario pero piden al menos un mes de disposición.
  • Nabo Jibon. Apto solo para hombres. Solo por las mañanas. Centro de hombres y niños mentalmente y/o físicamente disminuidos.
  • Daya Dan. Apto para mujeres y hombres. Por las mañanas y por las tardes. En la planta baja hay chicos que no están bien física y/o mentalmente. Aquí se requiere estar de voluntario al menos un mes. En la primera planta niños en las mismas condiciones.

En todos los centros el 80% es lo mismo lo que se hace.

¿Y cómo es el día de un voluntario?

Pues el comienzo depende de lo religioso que seas, normalmente.

A todo esto, cuando decidí ayudar en esta congregación, aunque sabía que era católica/cristiana no pensé demasiado en este hecho ya que yo solo tomé en cuenta el querer ayudar. Así que me sorprendí bastante cuando descubrí que la mayoría de los voluntarios eran bastante creyentes...y cristianos/católicos. Todavía me preguntó cuándo fue el momento en que se me ocurrió preguntarle a una voluntaria malaya si era hindú…

Volviendo al tema. Las misioneras celebran todos los días a las 6am una misa de más o menos una hora de duración en la Casa Madre. Se es libre de asistir o no. Yo finalmente conseguí ir un día (es muy duro levantarse antes de las 6am, incluso antes de las 7am) porque quería presenciarla al menos una vez. Ese es el momento del día en que todas las misioneras de Calcuta se juntan, alrededor de unas 100 me pareció, con sus saris blancos con franjas azules, en frente de un sacerdote que oficia la misa y cantan juntas. Al menos una vez merece la pena acudir.

Una vez se acaba la misa, a las 7am se sirve el desayuno (no es obligatorio ir) en el piso de abajo para los voluntarios. Éste es muy básico pero suficiente: chai, plátanos y pan de molde. Es un buen momento para hablar y conocer a otros voluntarios.

A las 7:30am se ponen al frente la Hermana Merci Maria (la responsable de los voluntarios y que habla español) y normalmente una hermana coreana también y juntas junto con los voluntarios que las quieran secundar (para ello está puesto escrito en la pared) recitan un par de oraciones. Luego, a veces, la Hermana Merci Maria da algunos consejos a los voluntarios y finalmente llega uno de los momentos más emocionantes de esta experiencia! La canción de despedida a los voluntarios que ese va a ser su último día. Éstos se colocan en el centro y la verdad es que la primera vez que presencié lo que venía a continuación me quede un poco en shock pero luego no pude evitar emocionarme un poco, esa vez y todas las demás veces que oí y canté la canción dando palmadas junto con todos hasta que me toco a mí. Me parece realmente un momento único.

La letra de la canción es la siguiente y realmente no tiene mucho misterio pero como digo hay que vivirlo:

“We thank you thank you thank you, we thank you thank you thank you, we thank you thank you thank you from our hearts.

We love you love you love you, we love you love you love you, we love you love you love you from our hearts.

We miss you miss you miss you, we miss you miss you miss you, we miss you miss you miss you from our hearts”

La traducción resumida sería algo así como: “te agradecemos desde nuestros corazones, te queremos desde nuestros corazones, te echamos de menos desde nuestros corazones”.

Después se abre la verja de la sala que da a la calle y ya nos vamos juntando en grupos por centro y al poco en marcha!

A mí en el pase de día me asignaron el centro de Prem Dan (significa "Regalo de Amor") y allí seguí.


Oficialmente las jornadas de trabajo empiezan a las 8am hasta aproximadamente las 12pm. Aunque al menos, los de Prem Dan íbamos siempre andando y la media hora entre esquivar vehículos, gente, cruzar una calle principal y la vía del tren no nos la quitaba nadie así que normalmente solíamos empezar hacia las 8:30am.


Los hombres a la zona de los hombres al final, y las mujeres al principio en nuestra zona. No nos volvemos a ver hasta la hora de descanso. Al vestuario, dejar las cosas, ponerse una bata y a trabajar! Algunas voluntarias iban directamente dentro del edificio a ayudar y otras iban a la parte trasera a lavar ropa. Yo me encontraba en el segundo grupo.



Cuando aparecíamos las massis (nombre que utilizamos las voluntarias para llamar a las mujeres indias que trabajan en los centros. Ellas nos llaman “auntie”) ya han hecho la mayor parte del trabajo y la verdad es que no solíamos pasar más de media hora en esa parte. La ropa primero se hierve, luego se mete en un gran balde y con jabón se frota. Si hay alguna mancha que no quiere salir, se le da con el cepillo y más jabón. De ahí se pasa la ropa a un fregadero lleno de agua, de ese a otro y finalmente a otro más. Se escurre todo, se mete en cubos y a la azotea a colgar la ropa. Aquí, algunas de las mujeres (así me voy a referir a las mujeres que viven allí y ayudamos) nos ayudan en la tarea.



Después yo ya entraba en el edificio y normalmente llegaba cuando ya se habían apartado todas las camas, se había limpiado el suelo inundándolo de agua y jabón, y las massis y voluntarias estaban echando el agua para la calle o por desagües a escobazos. Me unía a ellas.

Las mujeres mientras tanto están sentadas en el patio recibiendo su medicación por parte de las hermanas.

Después o ayudaba a limpiar el suelo de la calle (Prem Dan es un gran recinto cerrado…y un remanso de paz entre la locura que de gente y tráfico que hay justo fuera) llevando cubos de agua a las massis o empujando el agua a escobazos, o bien me quedaba dentro del edificio.


Allí, una vez seco el suelo (muy rápido con los ventiladores) empezábamos a colocar otra vez las camas y a hacerlas con ropa de cama limpia. En Prem Dan otra cosa no, pero limpieza vamos, todos los días casi al milímetro. Cuando ya está todo listo, llega el momento de estar con las mujeres.

La mayoría se encuentran sentadas en un patio cubierto. Algunas en sillas, otras en el suelo sobre una esterilla. Éstas últimas, por alguna razón, se mueven andando en cuclillas o arrastrándose por el suelo. Muchas no hablan o lo hacen muy poco. Y que sepan ingles cuatro contadas. A algunas les falta alguna parte del cuerpo, otras están ciegas o sordas, otras no controlan su propio cuerpo, otras parecen que tienen la mente muy lejos de allí…



Todavía me acuerdo de la impresión que me dio el primer día una de las mujeres cuando la vi de lejos, con el rostro totalmente deformado por el ácido que por alguna razón le echó su marido. En vez de ojos tiene piel, le falta parte de la nariz y de los labios y de piel. Tiene heridas abiertas que le curan todos los días…y mientras el tiempo pasa, ella de 25 años, no para de balancear la cabeza de atrás hacia adelante. Quizás para intentar hacer el dolor más llevadero.

Mi primer día de voluntaria no paró de llover. Una de las mujeres me pidió que la acompañase al baño, cruzando la calle, dentro del edificio. Muy pequeñita ella, se movía de lado a pasitos minúsculos. Una de mis manos en la suya y en la otra el paraguas. Bajo la lluvia pensaba que no llegaríamos nunca.

Otra de las mujeres, que no hablaba y cuya mente no parecía estar allí mucho, me respondía siempre con una gran sonrisa desdentada cuando le dedicaba una. Qué alegría!

Pero en cambio que duro el día que me toco darle el chai a una mujer que esta siempre postrada en una cama. Con la mente ida y tumbada en la cama, una massi le giró la cabeza hacia mí para que pudiese darle el chai. Pero su boca a penas se abría y solo se le veian un poco los dientes así que me dediqué a dejar caer el chai poco a poco a través de sus dientes hasta que empezó a lanzar un lamento cada vez más alto…pobre mujer.

Aunque por suerte, normalmente se lleva la jornada con alegría.

Las mujeres voluntarias en Prem Dan

Retomo el hilo. Cuando nos juntábamos con las mujeres normalmente a las que nos pedían les poníamos crema hidratante (que seca tienen la piel!) en las piernas, brazos, cara…Una de ellas solía querer todo el cuerpo y parecía siempre insatisfecha. Otra incluso se me tumbo y me hizo la croqueta para que no se me escapase ninguna parte!

También les gusta un masaje en la cabeza con aceite, que les pinten las uñas…Haciendo esas tres cosas estamos hasta que hacia las 9:30am les llega la hora del chai con galletas o arroz inflado. Entonces repartimos los vasos a todas. Algunas son muy impacientes y vienen hasta la mesa a por ello pero las massis en seguida les pegan un grito o las empujan en dirección a sus sitios aunque siempre desde el cariño...

Vamos recogiendo los vasos mientras van acabando y los lavamos. Luego retomamos las cremas, el aceite y los pintauñas, les quitamos las chaquetas y las doblamos porque empieza a hacer calor…hasta que son las 10 o 10:30am y toca nuestro descanso. Junto al patio hay un espacio con un par de mesas y bancos donde nos ponen chai y galletas también para nosotros. Allí nos juntamos todos los voluntarios, tanto mujeres como hombres, y hablamos y descansamos durante un rato.



Después a repartir los vasos de agua, quizás a doblar ropa en la azotea y en seguida, a las 11:30am, les toca comer a las mujeres. La comida suele consistir en un plato de arroz blanco con verdura en salsa y carne o pescado y una fruta (plátano, mandarina o uvas). Los grandes cuencos de comida se ponen en una mesa y en una cadena se van llenando los platos con todo ello y se van repartiendo. Algunas mujeres no pueden comer por si solas y hay que ayudarlas con una cuchara.

Una vez van acabando se recoge su plato y vaso, se apilan, e inmediatamente van entrando al edificio para la siesta. Muchas van por su propio pie pero a otras hay que ayudarlas a ir, algunas con sillas de ruedas o como en un patinete a las que andan en cuclillas o arrastrándose. Las que mejor lo llevan van al segundo piso de camas y las que peor se quedan en las camas de la planta baja. A algunas las acompañas al baño y una vez en la cama les pones la manta. Otras voluntarias mientras tanto friegan los platos, vasos, cuencos y cucharas y otras limpian y barren todo el patio.

Y así son ya sobre las 12pm y hora de irse!

A la vuelta, con el calor y las pocas ganas de estar como una hora andando a través del caos de las calles, cogíamos el bus 202 hasta la Casa Madre y de allí andando hasta Sudder Street. Ésta ultima parte son unos 20 minutos y se cruza un barrio musulmán.

Los viernes, el día más significativo de los musulmanes para rezar, puede darse el caso de que te encuentres con la calle bloqueada porque no caben todos dentro de la mezquita.


Hacia la 1 o 1:30pm llegábamos a Sudder Street.

Hay voluntarios que también acuden por las tardes a los centros que están abiertos. Normalmente de 3pm a 5:30pm. Y aunque esa era mi intención a los pocos días de empezar finalmente deje la idea a un lado. Acababa agotada ya solo con la mañana. La verdad es que en las tres semanas que pasé en Calcuta me sentí siempre cansada pero a gusto! Decir que varios días me eché siesta y en casa nunca lo hago…

Por la tarde, todos los días a las 6 o 6:30pm se puede acudir a la Adoración en la Casa Madre. Por curiosidad, también fui una vez y una vez más suficiente. Las Hermanas estuvieron leyendo en voz alta La Biblia (supongo) durante una hora y media al menos, porque a las 5:30pm que llegamos ya estaban en ello. 

Igual pensáis que las tardes las aprovechaba para ver sitios de Calcuta…pues tampoco! Entre comer, una siesta o descansar un poco y luego pasar un rato con otros voluntarios, se acababa rápido el día.

Los jueves no se trabaja en los centros. Pero a veces se organiza alguna visita como la que hicimos a la leprosería de Jyoti Nivas al otro lado del río.

A mí la palabra “leprosería” me traía a la mente imágenes nada agradables y eso es lo que esperaba ver allí pero nada más lejos de la realidad. Nos recibieron unos 50 hombres y una mujer en sus camas sin unos cuantos dedos de las manos y de los pies. A simple vista eso era lo único que saltaba a la vista. Nos sacaron unas sillas y en corro nos pusimos a cantar canciones aunque siendo de diferentes nacionalidades los voluntarios era difícil encontrar una canción que supiésemos la mayoría. Los italianos fueron los que más se lucieron. Un par de hombres también se animaron a cantar en su lengua, bengalí supongo. Pero la que sí cantamos y bailamos casi todos los voluntarios fue La Macarena!

Una de las mañanas en vez de ir a Prem Dan, fui al centro de Kalighat. Tuvimos suerte, y una ambulancia de la congregación que también iba allí, nos llevo a todos los voluntarios del centro. Las pre-hermanas (todavía no llevaban el sari blanco con franjas azules) que iban dentro se pasaron todo el viaje rezando.

Kalighat es tan solo un edificio y dentro viven unas 80 mujeres y hombres que al no haber ningún patio están siempre dentro y dentro se lava la ropa, se friega y se les da de comer. La ropa se empieza a lavar cuando llegan los voluntarios (las massis no empiezan antes como en Prem Dan) así que hay para un buen rato. Las mujeres están sentadas en un espacio pequeño con mesas y sillas junto a las camas. En realidad lo que se hace en aquí es muy parecido a lo que se hace en Prem Dan pero en un espacio mucho más reducido y cerrado que fue lo único que no me hizo mucha gracia. Me quedo con Prem Dan donde además ponen música.


Desde la terraza del centro de Kalighat

Un domingo las hermanas organizaron por la tarde una caminata por los diferentes sitios que estuvo la Madre Teresa cuando empezó con la Congregación. En cada sitio una de las hermanas explicaba que hizo allí la Madre Teresa pero éramos tantos voluntarios que era difícil oírla. También se rezaba en cada lugar. Al final de la tarde nos prepararon una cena.

Pero sin duda mi experiencia como voluntaria no hubiese sido la misma sin todos los fantásticos momentos que pase con otros voluntarios. El ambiente entre voluntarios es increíble y conocí a gente que realmente me llevo en el corazón: Sun Mi, Adriana, Mario, Mili, Victor, Javier, Massimo, Paul, Moniek, Mari Luz, Eva, Kavita, Daisy, Anna, Julia, Estefania, Esther, Megan, Chad, Rachel…

Y a pesar de sentirme cansada prácticamente en todo momento durante esas tres semanas, esta experiencia me llenó de energía. Una energía, admito, con la que no había llegado de Tailandia.



INFORMACIÓN ÚTIL

- Alojamiento: Hotel Galaxy
  • Dirección: 3, Stuart Lane, Kolkata. A un minuto andando de Sudder Street.
  • Habitación individual con ventilador y baño compartido: 400 INR
  • Teléfono: 0091 3322524565
  • Email: hotelgalaxy.kol@gmail.com / juvena.kol@gmail.com
  • Comentarios: si buscáis un poco en google sobre el alojamiento en Calcuta, lo vais a encontrar en seguida: sin duda el mejor hotel en la zona de Sudder Street relación calidad-precio es el Galaxy. Pero si vais directamente allí sin reserva y queréis estar más de una semana, estoy segura en un 99% que no vais a encontrar habitación. Incluso para menos tiempo también es difícil. Así que os recomiendo que les enviéis un email lo antes posible para reservar. Prefieren estancias de larga duración así que si queréis reservar un día o dos (no sé exactamente cual es el límite) posiblemente no os hagan caso al email u os cuelguen el teléfono como me hicieron a mi…no muy buena presentación. Aunque no tiene nada que ver el dueño, Harry, con los trabajadores.
Harry, un sijh, es un encanto. Siempre está dispuesto a ayudar. En cuanto oyó “dolor de estomago” fue a por su neceser de medicinas y nos dio a tres voluntarios del hotel pastillas. Al poco rato nos sentíamos mejor! Un par de italianas le preguntaron por un buen sitio para comer samosas y entonces al día siguiente las llevó e invitó a comer samosas y chai. En otra ocasión ofreció a una voluntaria del hotel llevarla a la mañana siguiente a desayunar, a conocer a unos amigos y al mercado de las flores. A otra voluntaria le trajo de regalo después de un viaje una chaqueta. A veces nos ofrecía plátanos o galletas…etc.

En cuanto a las habitaciones. Algunas están mejores que otras. Cuando llegué acababan de renovar una así que supongo que con el tiempo acabaran renovando todas. La mía tenía pinta de haber sido renovada no hacía mucho. Eso sí, la ventana no cerraba bien y le faltaba un trozo de cristal. Por lo demás limpia, en buenas condiciones y acogedora. Te dan una toalla.

A partir del creo cuarto día de estancia puedes pedir que te limpien la habitación (cambio de sabanas y toalla) que viene incluido en el precio.

Hay dos baños comunes y creo que junto con la mía solo hay otra habitación que no tenga baño así que más o menos era como si tuviese mi propio baño privado. Están bastante bien, con agua caliente.

El hotel tiene dos plantas y en cada una hay un frigorífico de uso común.

No tiene wifi.

En varias habitaciones a voluntarios les picaron chinches…en mi cama vi alguno pero por suerte parecía que no les gustaba…

Sobre el precio de las habitaciones. La mía era individual con baño compartido por 400 INR (aunque al poco de irme ha subido a 450 INR). Pero se de dos voluntarios que tenían igualmente individual pero con baño privado y estaban pagando 400 INR también. Las dobles: unas italianas pagaban 700 INR con baño y me dijeron que sabían de otras dos dobles donde pagaban 600 INR. Hay habitaciones más caras también.

Vi habitaciones en el hotel Modern Lodge (350 INR individual con baño), Paragon (500 INR doble con baño) y Maria (250 INR individual sin baño) y para mi sin duda vale la pena pagar un poco más para estar en el Galaxy. 


sábado, 15 de febrero de 2014

Calcuta


Calcuta junto con Nueva Delhi y Bombay es una de las principales ciudades de la India en cuanto a tamaño y habitantes y sin duda la que más me ha gustado entre las tres. Fue considerada en su momento la capital  cultural del país y aunque no tiene tantos lugares y tan espectaculares para ver como en Nueva Delhi, la ciudad en sí me pareció más agradable. Aunque no se escapa de la locura de tráfico de toda la India. 

Edificio en Esplanade de estilo colonial

Lo bueno también es que de la principal zona de alojamiento, Sudder Street, quedan lo suficientemente cerca como para ir andando varios de los lugares que merecen la pena ver: Park street, Victorial Memorial, Maidan, la casa de la Madre Teresa, New Market, iglesia de St. Paul, el planetarium, el cementerio…

Lo más cercano a Sudder Street, a tan solo un par de minutos, y también de lo más agobiante es el mercado, New Market. Probablemente no te apetezca volver después de la primera visita (aunque por las mañanas esta mucho más tranquilo) pero si vas a pasar varios días posiblemente acabes volviendo. New Market es un edificio rojo (o la zona en sí) bastante grande con tiendas de ropa, accesorios, comida…de todo. Pero sus alrededores no se quedan atrás y están llenos igualmente de puestos y tiendas y edificios con más de lo mismo. Es una zona bastante grande de compras. Puede llegar a ser bastante agobiante por la cantidad de gente que hay, más a la tarde, los vehículos que quieren pasar por medio con sus correspondientes pitidos y por los locales que no te dejan en paz queriéndote vender algo. 

A diez minutos andando de Sudder Street hacia el sur está la conocida calle de “Park Street”. Aquí puedes encontrar establecimientos como el Mcdonalds, Pizza Hut, la pastelería Flury’s (donde una botella de agua vale 120 INR!!)…y mucho hombre trajeado calle arriba calle abajo entre también los que tienen poco o nada… 

Una de las visitas que más me gustaron fue la que hice al Mercado de las Flores en Mallick Ghat, junto al puente de Howrah. Parece que cuando más actividad hay es temprano a la mañana. Yo fui hacia la 9:30am y aquello estaba lleno de locales. Imposible moverse entre las callejuelas con los puestos de flores y no estarte vengar rozar con alguien. Es un lugar muy fotogénico y auténtico. Durante el tiempo que pase allí no vi a ningún otro turista. Algunos comerciantes me pedían fotos, otros me sonreían y uno incluso me regalo una flor. Sorprendentemente sentí que allí se podía bajar la guardia respecto a los indios.





Pero lo bueno también de Calcuta es que si necesitas alejarte durante un rato de su bullicio, hay varios lugares para hacerlo.

Por un lado, está el parque del “Victoria Memorial”. Por cuatro míseras rupias puedes entrar y relajarte en sus jardines leyendo un libro, haciendo yoga o simplemente estando, con el precioso edificio del Victoria Memorial al fondo. 


En Park Street hay dos lugares que también lo conseguirán. El cementerio que aunque no está muy bien cuidado, es un sitio curioso con esas tumbas y tranquilo. 


Y luego, la librería “Oxford Book Store”. La planta de abajo es librería y la de arriba cafetería. Puedes coger cualquier libro y llevártelo arriba a leerlo mientras te tomas algo o en otra zona sin tomar nada. 

La gran iglesia de St. Paul, al lado del Planetarium y cerca del Victoria Memorial, también es un buen lugar para descansar y escapar un poco del calor. Y para verla, ¡claro!


Y bueno, ¿por qué no visitar el Hotel Oberoi de cinco estrellas y olvidarte de que estas en la India durante un rato? A cinco minutos también de Sudder Street, puedes visitar con tus pintas de viajero y sin ningún problema este hotel. Te recibirán como a cualquier huésped y no tendrán problema tampoco en sacarte una foto con el hombre vestido de Maharaja de la entrada o con la piscina descubierta del interior por ejemplo.  

Y no me olvido de otro remanso de paz y que todo visitante de Calcuta debe visitar: la casa de la Madre Teresa de Calcuta, Mother House. Se encuentra a 20 minutos caminando de Sudder Street y es un gran edificio gris con ventanas marrones. 

Es también la casa de las “sister”s y “mother”s que conforman la congregación de las Misioneras de la Caridad en Calcuta que creó la Madre Teresa. En una de las salas se encuentra la tumba de la Madre Teresa que murió en 1997. Al igual que Mahatma Gandhi, me parece otra persona digna de admiración y estar en el lugar donde descansa me resultó cuanto menos sobrecogedor. También se puede visitar, siempre que no sea jueves, la habitación donde vivió y murió. Una pequeña y simple habitación con una cama, un escritorio, una mesa con banquetas y poco más. Al parecer se negó siempre a tener un ventilador y eso que su habitación esta encima de la cocina y el calor en esta ciudad a partir de marzo/abril es sofocante. En otra de las salas hay una exposición sobre ella igual de interesante. 


No puedo hablar tan bien del Planetarium. Aunque el edificio es bastante bonito, la sesión de media hora en ingles no merece mucho la pena. Pero por 40 rupias pasas media hora entretenida y al final te dan un chai y una pasta gratis. Llegamos 5 minutos tarde y la sesión ya había empezado. Al poco de sentarnos, la mujer que llevaba la explicación en ingles, paró la presentación y toda indignada empezó a pedir silencio, que alguien hiciese callar a un pobre niño que no paraba de llorar. Cuando faltaba poco para terminar volvió a pasar lo mismo pero me pareció que exageraba. A penas se oían unos murmullos. Mi acompañante había estado hacía 7 años y me dijo que entonces pasó lo mismo lo que me lleva a pensar que igual es la misma mujer…además, su ingles me resultaba incomprensible. El espectáculo en sí no está mal, pero tampoco gran cosa. 


También me resulta imprescindible cruzar andando el increíble puente de Howrah. La estructura en si ya merece la pena pero también ver la marea humana que no para de atravesarlo junto con los vehículos. Por alguna razón, no se pueden hacer fotos desde el puente aunque yo hice alguna y nadie me dijo nada… 


Al norte de la ciudad está el templo de Belur Math. Bastante bonito por fuera pero menos de lo que esperaba por dentro. Prohibido hacer fotos, incluso por fuera. Cuando lo intenté me llamarón la atención…


Desde allí cogí una barca río arriba hasta el templo de Dakshineswar. La barca te deja en las mismas escaleras donde hay gente bañándose y que llevan a la entrada del templo. Éste me sorprendió más que el de Belur Math. Y aunque también ponía que estaban prohibidas las fotografías, hice unas cuantas cuando vi que los propios indios no cumplían la regla. Hasta que llamaron la atención en general por los altavoces. 


También recomiendo un paseo en barco por el río. Aunque sea cruzarlo en uno de los barcos de pasajeros que van desde la estación de tren de Howrah a una de las paradas río abajo. 

Al fondo a la derecha la estacion de tren de Howrah

El Museo Indio está en la propia calle de Sudder Street y aunque no entré (150 INR), el edificio por fuera es bonito. 

Calcuta es de las pocas ciudades en la India que tiene metro pero por lo que he visto, es la única ciudad en el país donde todavía existen los Hombres Caballo o los hombres que basándose solo en su propia fuerza hacen de taxi tirando de un rickshaw. Enseguida me vino a la mente el libro “La ciudad de la Alegría” situado en Calcuta hace unos 30 años y que cuenta la historia de uno de estos hombres. Os lo recomiendo. Choca ver a estos hombres, que son poco más que carne y hueso, empujar de ese asiento con dos grandes ruedas…

Foto de trajinandoporelmundo

Y las vacas, también brillan por su ausencia increíblemente!



INFORMACIÓN ÚTIL

- Cambio: 1€ = 83’3 INR

- Bici rickshaw zona ghats-estación de tren Varanasi: 50 INR

- Tren Varanasi-Kolkata (calse "sleeper", 14 horas y 15 min): 320 INR

- Ferry estación de tren Howrah-Badughat: 5 o 6'5 INR

- Sesión Planetarium (30 minutos a las 1:30pm y 6:30pm): 40 INR

- Entrada jardines Victoria Memorial: 4 INR

- Bus estación de bus Esplanade-Mercado de las Flores: 5 INR

- Bus 54 estación de bus Howrah-Templo de Belur Math: 7 INR

- Guarda calzado en el templo de Belur Math: 2 INR

- Barca templo de Belur Math-templo de Dakshineswar: 10 INR

- Bus templo de Dakschineswar–estación de bus Esplanade: 8 INR

- Bus estación de bus Esplanade-estación de tren Howrah: 7 INR

- Bus VS1 estación de bus Esplanade-aeropuerto de Calcuta (1 hora y 30 min): 40 INR

- Alojamiento: Hotel Maria
  • Dirección: 5/1 Stuart Lane. Calle perpendicular a la conocida Sudder Street.

  • Habitación doble con ventilador y baño compartido: 300 INR
  • Comentarios: habitación deprimente. Necesita una reforma. Menos mal que fue solo una noche. Pregunté antes en otros 3 alojamientos: dos estaban llenos, el otro (Hotel Paragon) me ofrecía por igual precio y tiene igual de malas críticas. Y me constaba que el resto de alojamientos en los alrededores eran más caros. El baño compartido pues bueno, peor que la habitación no está al menos. Ese no tenía agua caliente pero en otra ala del alojamiento había otros dos baños con agua caliente fuera para llenar cubos. No tiene wifi pero tiene ordenadores por 10 INR/30 min o 15 INR/1 hora. No los utilicé. El recepcionista conmigo fue correcto pero mientras esperaba vi como se burlaba de un oriental con el que estaba hablando y que no sabía ingles. Tiene habitaciones individuales por 250 INR aunque cuando yo llegué estaban todas ocupadas. Vi una por fuera y es una habitación muy pequeña con una cama. 
 

viernes, 14 de febrero de 2014

Comida, transporte, tarjeta sim, seguridad…en Tailandia

COMIDA

La comida es un punto fuerte en Tailandia. Hay puestos de comida prácticamente por todas partes y resultan más baratos que los restaurantes. Algunos no tienen donde sentarse pero la mayoría tienen mesas plegables y pequeños taburetes.

Hay bastante variedad: carne, pescado, verdura, fruta…aunque la mayoría de los platos tienen como base arroz, sobretodo, o noodles (fideos).



El picante también está presente en la gastronomía tailandesa aunque se caracteriza por la mezcla de sabores agrios, salados, dulces, amargos y picantes.

De cara al turista, el plato tailandés más popular es el “Pad Thai”. Son fideos de arroz con salsa de pescado, azúcar, zumo de lima o pulpa de tamarindo, cacahuetes troceados combinado (a añadir o no) con huevo, pollo, pescado o tofú. Muy bueno.


También son famosillos los currys que se denominan amarillo, verde o rojo. Cada cual más picante. Yo no probé ninguno de los tres pero sí que probé el curry con leche de coco (también es un ingrediente común) y verdura (con arroz blanco a parte) que estaba buenísimo.


Las sopas con fideos y carne o pescado también son muy comunes.


Pero su sopa estrella es Tom Yum. La probé una única vez y no me hizo mucha gracia la verdad…pero le daré otra oportunidad. Según wikipedia, el caldo tiene (no sé que es como la mitad…) hierba limón, hojas de lima kaffir, galangal, chalotas, zumo de lima, salsa de pescado, tamarindo y chillis molidos. El caldo estaba bueno. Y se sirve con gambas, pollo, pescado o con una mezcla de mariscos y setas. La sopa se cubre con hojas picadas de coriandro. Mi sopa tenía gambas y otras cosas que no se que eran pero que no me gustaron.


La ensalada de papaya (Som Tam) es otro plato popular. Solo la probé una vez también pero no me hizo mucha gracia quizás porque estaba demasiado picante para mi gusto y eso que me apuntó no-picante…


Luego están los puestos de pinchos. No como los vascos eh. Seguramente sean los puestos que más se repiten. Pinchos de pollo, cerdo, pescado, tofu, salchicha…


También son comunes los puestos de batidos, fruta o crepes. El crepe de chocolate/nutella y plátano fue parte de mi dieta bastantes veces…


Y por supuesto, el puesto de los insectos fritos!!


Que no me atreví a probar…

Pero si tengo que elegir una comida tailandesa entre todas las que he probado, no tengo ni media duda: el arroz glutinoso con mango y leche de coco (sticky rice with mango)!! En realidad es un postre y esta buenísimo. Una auténtica delicia.


En realidad tengo la impresión de haber probado durante mi estancia una parte muy pequeña de la gastronomía tailandesa y seguramente sea así.

Los supermercados de la cadena estadounidense “7 Eleven” están por todo el país (bueno, en Railay no había) cada pocos metros. Es una pasada, hay un montón. Son pequeños pero están muy bien ya que tienen bastante comida precocinada que te la preparan cuando la compras, bebidas para llevar, bollería…




Los supermercados “Tesco Lotus” bajan al menos a la mitad los precios de los productos que caducan ese día. Están señalados con una etiqueta amarilla.

Algunos precios de referencia (en puestos callejeros normalmente):
  • Pad thai: 25-50 baht. En las islas 60-80 baht pero la ración es el doble.
  • Sticky rice with mango (arroz glutinoso con mango): 30-60 baht
  • Crepe de chocolate y plátano: 25-35 baht.
  • Crepe de nutella y plátano: 35-50 baht.
  • Arroz blanco con carne o pescado o mezcla de ambos: 25-35 baht. En las islas 60-70 baht.
  • Pinchos: 5-10 baht. En las islas 20 baht.
  • Agua 1’5 litros: a partir de 12 baht. En las islas y Railay 20-40 baht.
    • En Railay y Koh Phi Phi vi unas botellas especiales de 950 ml por 10 baht.
    • En Bangkok hay por la calle de vez en cuando maquinas de agua filtrada. La que utilicé yo era 1 litro por 1 baht.



CAJEROS AUTOMATICOS

Da igual que quieras sacar 1 euro o 1000 de un cajero automático en Tailandia. Todos los cajeros de cualquier banco te cobran una comisión de 150 baht, más la comisión de tu propio banco si es que la tienes. 

PERO, hay un banco que NO cobra los 150 baht: AEON BANK. Lo malo es que hay muy pocos cajeros y ninguno por la zona turística de Bangkok. Yo aproveché a utilizar uno que estaba cerca de la Embajada de Bangladesh.



TRANSPORTE

Las carreteras están en muy buen estado.

Para viajar a las islas lo más conveniente, sorprendentemente, y al parecer más barato que hacerlo por tu cuenta, es ir a una agencia y comprar un billete combinado que te incluya ya todo: bus/tren, ferry y traslados entre uno y el otro. Lo tienen todo muy bien organizado. Los autobuses suelen ser de dos pisos y están bastante bien. Dichas agencias tienen sus propias estaciones de autobuses y puertos y por ejemplo en Bangkok, salen y llegan a la zona de Khao San Road y no a alguna estación de autobuses.



Los autobuses que utilicé para moverme hacia y desde y por la zona de Kanchanaburi funcionan como en Sri Lanka y en India en cuanto a que el billete se compra dentro del autobús. Únicamente para ir a Kanchanaburi desde la estación sur de Bangkok lo compre en un puesto justo fuera del andén del bus. Los autobuses, algunos eran modernos y otros no tanto.




Respecto al tren, solo lo utilicé una única vez en la zona de Kanchanaburi y no creo que se pueda tomar como referencia para el resto de los trenes del país. Solo tenía asientos de madera y era bastante lento.





TARJETA SIM E INTERNET

Parece que la compañía más recomendable para conseguir una tarjeta sim es TrueMove. La tarjeta se puede comprar (y recargar) en cualquier supermercado “7 Eleven” pero yo recomiendo ir directamente a una tienda oficial porque al menos en el supermercado que yo pregunte parecían saber sólo que vendían la tarjeta.

En Khao San Road hay un callejón donde hay una tienda (que también es un café) oficial de TrueMove. Allí me explicaron que dos opciones tenían, me instalaron la tarjeta y me activaron el internet. Muy bien.

Las dos opciones:
  • Tarjeta sim prepago por 299 baht. Con 100 baht de saldo a gastar en una semana desde la activación e igualmente una semana de internet ilimitado.\
  • Tarjeta sim prepago por 49 baht. Con 20 baht de saldo a gastar en una semana desde la activación e igualmente 90 MB de internet durante una semana.

Después de la primera semana tienen los siguientes planes de internet (se pueden contratar introduciendo un código en el móvil):
  • 49 baht: ilimitado durante 1 día.
  • 100 baht: 250 MB durante 10 días.
  • 250 baht: 500 MB durante 30 días.
  • 450 baht: ilimitado durante 30 días.

Precios:
  • Mensajes internacionales: 5 baht
  • Llamadas: primer minuto 10 baht. Siguientes 1 baht/minuto utilizando en el caso de España 00660034… o 3 baht/minuto (mejor calidad) utilizando 006634…

De todos modos, así como con las llamadas todo perfecto, el internet no me funcionó bien. Los primeros días en Bangkok y en Koh Tao muy regular. En la zona de Kanchanaburi los datos ni siquiera se activaban. En Railay, al menos en Ton Sai no había cobertura, solo en algunos puntos de la playa. La última semana en Bangkok mejor pero aún así dejaba bastante que desear.

La compañía True Move tiene también puntos wifi por todo el país. Especialmente en Bangkok lo vi muy extendido. Si te registras (ICT free wifi by TrueMove) puedes usarlo media hora al día gratuitamente.

En los cybers normalmente es 25-30 baht/hora. En las islas 1-3 baht/minuto.



SEGURIDAD

Tailandia es un país totalmente seguro. Los tailandeses están más que acostumbrados al turista y no te miran más de lo normal.

Respecto a la actual situación política, en Bangkok me encontré con varios campamentos de los manifestantes y con una manifestación y ni medio problema. Muy tranquilo y alrededor han montado todo puestos vendiendo ropa y objetos con los colores de la bandera tailandesa y puestos de comida. Más que alejarse del lugar, invita a acercarse.








ENCHUFE

NO se necesita adaptador de enchufe en Tailandia. Solo una vez, en un restaurante de Koh Tao, me paso que no había manera de que entrase. A veces, con algunos enchufes le costaba un poco pero al final siempre acababa encajando.